En el marco del Día del Profesional en Nutrición a celebrarse el día 27 de enero, la Mtra. Alejandra Garduño, Docente en la Facultad de Turismo y Gastronomía compartió algunas recomendaciones para iniciar el año con una sana alimentación.

Como cada año, al sonar las campanas que nos anuncian la llegada de una nueva vuelta al sol, hacemos una lista con nuestros propósitos para este año y tratamos de evaluar si logramos cumplir algunos del que termina: ¿Cuántos propósitos que no logramos buscaremos concretar en este?

Así que para arrancar con todo el ánimo este nuevo ciclo aquí te doy 10 posibles propósitos para mejorar tú alimentación y nutrición, esperando así que con cada uno de ellos puedas lograr una gran meta, tener una mejor salud.

• Propósito 1: “El reto” Hoy me subo a la báscula y me hago un chequeo médico. ¿Cuántas personas le temen a la báscula e ir al médico al iniciar un nuevo año? Obviamente la mayoría, pero esto es crucial en el cuidado de nuestra salud; el conocer si mi peso es adecuado o no, así como realizar un chequeo general una vez al año es indispensable, así sabrás si tienes algún desequilibrio o enfermedad que desconoces. Realizar un examen de sangre para conocer tu glucosa (azúcar en sangre), triglicéridos y colesterol (grasa en la sangre), revisar tu presión arterial y ver cuál es tu peso, te permitirá iniciar los cambios que sean necesarios.

• Propósito 2: “El clásico” bajar de peso. Ya te subiste a la báscula, ya sabes que las festividades decembrinas te dejaron unos kilos de más o se unieron a los del año pasado, es momento de mejorar tu alimentación y realizar ejercicio. Recuerda que el peso extra no lo obtuviste en 1 mes, por lo que bajarlo será cuestión de tiempo y dedicación, ¿Cuánto? El que sea necesario.

• Propósito 3: “El tradicional” Me voy a inscribir al gimnasio. ¿Por qué creemos que el ejercicio solo se puede hacer en un gimnasio? Para realizar alguna actividad física solo se necesita decisión, constancia y fuerza de voluntad. Empieza poco a poco, puedes caminar 20 minutos (no olvides dar la vuelta a los 10), seguir rutinas en línea, andar en bicicleta, correr, bailar; claro que puedes ir a un gimnasio, ingresar a un deporte de equipo, ir a nadar, etc. Solo recuerda elegir un tipo de ejercicio que te guste y te haga feliz ya que de lo contrario es fácil dejarlo.

• Propósito 4: “El Hidratado” Voy a tomar más agua natural y dejar el refresco. Este propósito es ideal y al igual que los dos anteriores se logra con perseverancia. Empieza por tomar 3 a 4 vasos de agua natural al día y disminuye el refresco que tomas, sustitúyelo con refresco de dieta y si no te gusta trata tomar agua mineral. Poco a poco verás que tu cuerpo necesita tomar más agua y eso te ayudará, a disminuir de peso y mejorar tu metabolismo.

• Propósito 5: “El Vegetariano” Ahora si voy a comer más verduras. Esta es una costumbre y hábito que ha muchos les cuesta trabajo, ya que si desde pequeños no probaste y aprendiste a comer verduras no son de tu agrado. Así que la sugerencia es hacer lo que los bebés cuando empiezan a probar nuevos alimentos: comer verduras de 1 por 1; por ejemplo, esta semana 2 días pruebas brócoli, 2 días coliflor y 2 días espinacas. No necesitas comer mucho ½ taza, esto te ayudará a familiarizarte con su sabor, consistencia y poco a poco incorporarlas a tu dieta diaria. Haz esto con todas las verduras que puedas, obviamente habrá las que te gusten y otras no, pero podrás tomar buenas decisiones.

• Propósito 6: “El gusgo” No cederé a mis antojos. Este es uno de los propósitos más difíciles de lograr, porque evitar comer por antojo o gula es muy difícil. Trata de no complacer todo lo que se te antoje, restríngelo a los fines de semana y en pequeñas cantidades. Y aprende a reconocer cuando lo que sientes es hambre o solo antojo.

• Propósito 7: “El chef” Prepararé mi propia comida. Esto es todo un reto en el momento actual, ya que con la carga de trabajo el poder darnos tiempo para preparar y cocinar platillos que sean saludables se torna complicado ¿Cómo lograrlo? La sugerencia es por medio de una buena organización de tiempos y personas. Pongámonos de acuerdo y ayudemos todos para poder cocinar durante el fin de semana, entre todos será más rápido y eficiente, además los platillos pueden ser no tan complicados y fáciles de realizar. Al terminarlos divídanlo en porciones individuales, guarden en refrigeración y cada día de la semana podrán in comiéndolos.

• Propósito 8: “El goloso” Diré no a los postres (bueno casi siempre). Este puede ser un total dolor de cabeza para muchos, ya que decir que no a un antojo dulce sobre todo al término de la comida resulta muy difícil, ¿cómo podemos disminuirlo? Si tienes ganas de comer algo dulce escoge alguna fruta de tu preferencia, puede comer una combinación de moras (fresas, zarzamoras, moras azules) con el sustituto de azúcar de tu preferencia, comer una manzana con un poco de azúcar y canela (esta puede ser cocida o natural), 10 uvas, melón o sandía con unas 2 cucharadas de yogur griego y sustituto de azúcar. Poco a poco esto será parte de tu rutina y generarás una nueva costumbre alimenticia. Obviamente habrá ocasiones especiales tu cumpleaños, algún aniversario, algún evento especial que incluirá un postre o pastel, trata de no comerlo todo, satisface el antojo dulce sin excesos. Recuerda que esto es un propósito de mejora no una tortura.

• Propósito 9: “El milagroso” Me dijeron que si como … bajaré de peso. No te dejes engañar con espejitos, ningún alimento es milagroso o mágico, para hacer que bajes de peso. La única forma real y saludable es cuando aprendes a comer de forma correcta, eligiendo alimentos bajos en grasa, azucares y calorías, consume mayor cantidad de alimentos frescos como frutas y verduras de temporada, elige alimentos de origen animal que tengan poca grasa como pescado, carne con poca grasa, cocina tus alimentos con el mínimo de aceite y que este sea de buena calidad como de aguacate o uva. Recuerda ningún alimento será efectivo por sí solo, la combinación de ellos en cantidad y calidad será relevante.

• Propósito 10: “Hago una dieta saludable de lunes a sábado, pero el domingo es libre” Una gran mentira, aprender a comer de manera saludable no es en ratitos o solo algunas veces, hay que tratar de convertirlo en un hábito constante; ya que aunque te portes muy bien 6 días de la semana si el domingo es un buffet interminable de nada servirán los esfuerzos. Pero si la comida del domingo suele ser un poco desastrosa, trata de comer en menores cantidades, elige platillos menos calóricos (sin tanta grasa y azúcar). Hay que aprender a elegir nuestras batallas y reconocer nuestras debilidades, si para ti el postre es lo máximo que el resto de la comida sea saludable y come un postre pequeño, si por el contrario para ti la comida salada es tu perdición, busca combinaciones que incluyan verduras esto te ayudará a sentirte satisfecho más rápido y serán más saludables.

No olvides que seguir estos propósitos te puede ayudar a tener una vida más saludable y lo ideal es llevarlos a cabo por toda la vida.